Las continuas depilaciones de las cejas, las secuelas derivadas de las micropigmentaciones o perfilados permanentes y el paso de los años suelen ser la causa más frecuente de la desaparición del vello de la ceja.
El trasplante de cejas permite repoblarlas parcial o totalmente, de manera definitiva y con resultados naturales y armónicos.
Obteniendo el pelo donante de la parte de la nuca, ya que es un pelo de características y grosores similares a los de las cejas, el médico implantará uno o dos pelos como máximo, respetando siempre la dirección de crecimiento del mismo, y después de haber hecho un estudio concienzudo del tipo de cejas que mejor armonicen con el rostro del paciente, para garantizar resultados naturales.
El número de unidades foliculares a trasplantar oscilará entre 200 y 400, pudiéndose utilizar unidades simples o dobles como mucho, siendo esta, una cirugía sencilla, de no más de 3 horas de duración, realizada con anestesia local y que permite al paciente irse a casa después de la misma cubriendo la zona con unas gafas de sol. Pueden aparecer unas leves costritas alrededor de las unidades foliculares implantadas, que desaparecerán en una semana.